Yo Nunca (o Never Have I Ever en su versión inglesa) trata sobre una joven que acaba de perder a su padre. La forma más sencilla (altamente complicada, en realidad) que encuentra para superar este momento tan difícil, sin tener que enfrentarlo directamente, es centrándose en el amor.
Rozo la treintena y aun así no me canso de ver series y películas claramente dirigidas a adolescentes. ¿Será que sigo siendo un poco quinceañera? Probablemente.
La sinopsis de Filmaffinity afina un poco más y nos da un pelín más de información, contándonos que es: “Una comedia de paso a la madurez sobre la vida de una adolescente estadounidense de origen indio de primera generación, inspirada en la infancia de Mindy Kaling, productora y guionista de la serie.”
Como podéis imaginar, me ha encantado. Me he reído muchísimo viéndola, pero es que además he llorado a moco tendido. Es súper fácil empatizar con la protagonista y odiar a su madre.
Como serie, “Yo Nunca” es inteligente, divertida y fresca. La manera que tienen de presentar los hechos, las escenas en que vemos la imaginación de Devi a mil por hora, sus amigas y todos los problemas de las personas que tiene a su alrededor, lo estúpida que es a veces nuestra protagonista, la terapeuta de Devi… Es muy entretenida. Aunque nunca querrías tener que pasar por las mismas situaciones, siendo sinceros.
No es una serie especialmente original porque trata temas que ya hemos visto antes: adolescentes salidos, padres muertos, madres controladoras, amistades inestables, triángulos amorosos, etc. Tal vez, en este caso, lo diferente está en cómo está contado. El sexo pero desde el punto de vista de una adolescente que acaba de pasar por un trauma y que está utilizando sus relaciones amorosas y toda su vida social para evitar enfrentarse al hecho de que está tremendamente triste.
Vamos, que acaba siendo una dramedia adolescente. Género que me encanta, por cierto.
En general, me pasa con estas series que siempre veo improbable que suceda todo lo que me cuentan, supongo que es porque no encaja con los estereotipos clásicos. Pero bueno, ya comentaba al principio que rozo la treintena, a lo mejor es que han cambiado. ¡Yuju!
Me encantaría hacer algún spoiler para comentar algunas cosas más, pero por si alguien no la ha visto aún, me lo voy a ahorrar. Que total, mi opinión no es tan importante. Solo diré que el chico macizo que le gusta, a mi ni me parece tan guapo, ni me cae tan bien ni me parece tan majo.
Tal y como termina la serie cuesta imaginar que no haya una segunda temporada. Por si las moscas lo he comprobado y ¡Netflix confirmó el 1 de julio de 2020 que si! Habemus nueva temporada de Yo Nunca. Si hay algo que no me ha gustado: no me acuerdo. Es una serie que entretiene y aporta. Además, se ve prácticamente en un día. De hecho, acaba sabiendo a poco… ¡por eso me he escrito un post sobre los curioseos de la serie!
Un pensamiento en “Yo Nunca, una serie de adolescentes fresca y divertida”